¿Quieres vivir del Marketing?, evita ESTO¡

Cuando comenzamos un proyecto, debemos cometer Errores, y digo debemos, pues sin los Errores jamás vamos a aprender nada, pero una vez comiences evita estos pequeños HORRORES, (Aplica para la vida, negocios, marketing, dinero etc etc)

1.- No validar tu producto. ¿Eso qué quiere decir? Que hay muchos emprendedores que lanzan un producto o servicio al mercado simplemente porque ellos, algún familiar o sus amigos les dicen que es una gran idea. Sin embargo, no se toman la molestia de investigar el mercado, de preguntarle, para saber si en realidad esa es una necesidad de la que todavía no solución.

Vender lo que tú quieres y no lo que el mercado requiere es un grave error porque todo lo que hagas será inútil. Tu dinero, tu esfuerzo, tu trabajo, tus recursos y tu tiempo irán directo a la basura. La mejor idea, amigo mío, es preguntarle al genio del marketing: al mercado. Valida tu producto, ajústalo a las necesidades del nicho al que atacarás y te evitarás muchos problemas.

2.- No conocer a tu cliente. Cuando no sabes a quién vas a dirigir tu mensaje, cuando no sabes cuáles son las necesidades de tu cliente, cuando no conoces cuál es su dolor, tu mensaje se perderá. De hecho, nada te dará el resultado que esperas, porque hoy la clave del marketing está en tu capacidad para establecer una relación de confianza y credibilidad con el mercado.

Y, si no conoces a tu cliente, nunca conseguirás que confíe en ti, que crea en ti. Definir a tu (s) cliente (s) ideal (es) es una tarea imprescindible que muchos menosprecian y después lamentan. Lo más conveniente es definir más de un buyer persona, de acuerdo con cada uno de los segmentos que componen tu mercado. No lo olvides: tu cliente tiene mil y una caras.

3.- No medir los resultados. O medirlos mal, que es otra variante. A muchos emprendedores les cuesta cambiar el chip de las redes sociales, aquel de acumular seguidores. Sin embargo, te lo puedo jurar con una mano sobre la Biblia, no existe un negocio, uno solo, que subsista gracias a los seguidores. ¿Sabes por qué? Porque los seguidores no compran, quieren que les des todo gratis.

En marketing, lo que no midas, no sirve. Así, tajantemente. La clave para saber cuáles de tus estrategias funcionan, y cuáles no; para determinar qué corregir o reforzar, está en los números. Por fortuna, hoy existen poderosas y confiables herramientas que nos permiten medir cada paso que damos, cada clic. Las métricas son tu brújula: si no las tienes, andarás perdido sin remedio.

4.- Creerte un superhéroe. Es un vicio que termina por frustrar a buenos emprendedores que no evolucionaron y se quedaron en aquella época de los toderos en la que, por falta de recurso o de material humano, debíamos hacerlo todo. Sí, es cierto, en una época fue así porque no había alternativas, pero hoy este hábito se ha convertido en un serio obstáculo para muchos.

Aprender a delegar, a creer en otros que son especialistas, es una de las habilidades que un buen emprendedor debe desarrollar. Tu trabajo debe enfocarse en las 3-5 tareas cruciales, aquellas que tú y solo tú puedes hacer, como las estrategias de marketing, el networking o manejar el dinero. El resto, ponlas en manos de personas capacitadas que te permitan competir al más alto nivel.

5.- Ser desorganizado. Este mal hábito es como un travieso duende que se ríe de quienes lo ignoran. El quehacer del emprendedor es agobiante por la cantidad de tareas que debemos cumplir, de modo que si no eres organizado lo que te espera es el caos. Y, en ese ambiente, te quedará muy difícil, por no decir imposible, obtener los resultados que esperas y requieres.

Ser desorganizado es un hábito cultivado inconscientemente y su origen, por lo general, está en la procrastinación: acumulas tareas pendientes, tareas hechas a medias y tareas que esperas realizar algún día. Nunca comienzas con unas, nunca terminas con otras y así tu dinámica de trabajo es un caos. Aprende a priorizar, sé disciplinado, delega y algo muy importante: déjate ayudar.